Adiós a las vacaciones, adiós a la piscina para mí sola, adiós a la tranquilidad, adiós a las comiditas hechas por mi mami que se convierten en comilonas -no tienes fondo, me dice mi hermano- adiós a los helados después de comer, después de cenar, adiós a la siesta con el ventilador y la tele con los programas de cotilleo de fondo -perfecto para la siesta-, adiós a las series nocturnas y diurnas a las que me aficiono y hago adicta en verano , sólo en verano, adiós a las noches tranquilas, a los paseos nocturnos con mi padre y peky, adiós a las duchas en el patio con la manguera de abuelo para regar las plantas, adiós a las escapadas a la playa, a casa de los amigos con piscina, adiós a las excursiones con la familia, adiós a los cumpleaños veraniegos, adiós a los paseos en bici, adiós a las bromas y juegos con mis hermanos, adiós al dolce far niente.
Adiós a las vacaciones del verano.