Ventana 3

Despidiéndome de mi ventana,
con las luces brillantes del horizonte

Ventana 2

 

En la ventana

por el día

Sin palabras

Así estoy, sin palabras. Me gustaría desahogarme y vomitar todo lo que llevo dentro, todo lo que estos días estoy sintiendo. Pero son tantas las imagenes con sonidos que se agolpan en mi cabeza y se estrellan contra mi cráneo que es imposible que articule palabras encadenadas contando algo, algo bonito o feo, alguna historia que haga olvidar mis penas y me lleve a otro sitio aunque sea un momento.

Juana

Con la oreja pegada a la pared, muy quetita, apenas sin respirar, escuchaba su voz. Para ella, para Juana, su voz era una dulce música, a pesar que el contenido de esas palabras era algo muy técnico y científico a la vez, a pesar que había una pared que les separaba e impedía que se vieran. Pero Juana le imaginaba diciendo esas palabras, ese discurso tan bien aprendido. Estaba tan atenta a su voz que hasta notaba cuando vacilaba, cuando titubeaba, y le imaginaba algo nervioso entonces ella se deshacía por dentro, se derretía aún más.

Después cuando volvió a su casa no paró de suspirar y suspirar y suspirar y suspirar y suspirar y suspirar y suspirar y suspirar y suspirar y suspirar y suspirar.

Ay!!!! aaayy!!!

Alturas *****

Arriba.

Subida a las alturas,
del revés,
caminando al aire
con paso firme

Me he vuelto a enamorar...

Me he vuelto a enamorar y tengo el corazón dividido....

Sueño

Sueño contigo despierta
Sueño contigo dormida
pero no quiero soñar ya más contigo.

Rosa **

Qué bonitos, qué bonitos se veían mis piezecitos en estos zapatitos
María, ¿quieres que te los deje un ratito?
pero con tranquilidad que todavía no los tengo.

La bella durmiente

Sol ardiente de junio, Flaming June, 1895, Frederic, Lord Leighton

Hoy he recordado esta imagen, fue la pasada primavera, me acerqué al Museo para otros menesteres, pero había una exposición sobre la pintura victoriana del Museo de Arte de Ponce, y no pude dejar de ir a contemplar esta belleza, ya que había visto la imagen por la ciudad y a la entrada del Museo. Mis pies me llevaron a buscar este color, esta luz. Me encantó, me maravilló, me embelesó, me extasió.

Esta obra hay que verla en vivo, pero para ello hay que cambiar de país y continente, allende los mares, en el MAP , en Puerto Rico.

Ventana

Porque hace calorcito para llevar los pies así, con estas sandalias de esparto
que hacen más bonitos mis pies.

Revuelto

Como aquí sólo hablo de temas profundos y nada triviales, sólo quiero reflejar una profunda reflexión sobre la moda y los tiempos que corren, tema profundamente profundo y nada nada trivial.

Me gusta esta época del año, en la que se ve reflejado como el fenómeno de la globalización llega incluso, no a la moda que hace mucho tiempo ya llegó, a las estaciones. Es muy divertido observar como va vestida la gente, te encuentras desde el que parece que viene de la playa directamente, al que parece salido del Polo Norte. Es muy divertido ver como se mezclan los diferentes estilos con la diferente ropa de temporada, chicas con sandalias, o con botas y jerseys de cuello alto, abrigos, camisetas de tirantes. Parece como si el mundo se hubiera vuelto loco. Pero a mi me divierte tremendamente mezclar la ropa de verano con la de invierno, fotografiar a la gente y mucho tiempo después intenta adivinar en qué época del año estábamos.

Modernos

Zapatitos de tacón,
zapatitos más modernos
ay que pena!
no tener ocasión para ponérmelos
tan bonitos se verían mis pies!!
alguien que me invite a una fiesta?

Llueve

Llueve, llueve mucho. Está lloviendo a mares, está cayendo el diluvio universal, está cayendo un buen chaparrón. Que llueva, que llueva, que limpie todo el aire viciado, que limpie todas las almas.

Llueve, ojalá llueva en mi alma y mi corazón se quede limpio.

Julia*****

-Hola, ¿qué tal?

-Hola.

Julia no lo podía creer, le había preguntado que tal? Le había preguntado a ella, le había dicho a ella algo más que el simple Hola de rutina!!!. Y esta vez ella era que no decía más que hola.

No le importaba, él ya no le importaba.

O eso creía

Rosa

Zapatitos de señorita,
de color rosa
para andar coqueta
en algún sitio elegante

19 años después...

Fue un día muy emocionante, para mí el más emocionante en mucho tiempo. Estaba muy nerviosa y contenta a la vez. Después de 19 años volvimos a vernos en la puerta del cole. Todo gracias a las nuevas redes sociales. No estábamos todos, algunos no habían podido venir, otros viven lejos en otras provincias, a otros no les habíamos localizado, y alguno ya se lo llevó el tiempo.

Casi todos ya están o casados, o en pareja, con hijos, con grandes trabajos, casas y coches, pero todos seguíamos igual. Recodamos muchas cosas, algunos más que otros, nos reímos mucho, lo pasamos muy bien. Fue muy bonito, entrañable, y me sentí muy cómoda, en familia. La próxima vez, dijimos, no pasarán 20 años.

19 años después, en la puerta del cole volvimos a vernos.

Valentina**

Valentina le hizo honor a su nombre, lo pensó varias veces, respiró hondo, volvió a vacilar, volvió a respirar hondo, se armó de valor y le dijo que ya no le quería, que ya no estaba enamorada de él. Pero luego no paró de llorar, pasó dos días enteros llorando como una magdalena.