




Este año que ya se ha ido ha sido un año de cambios, de cambios y logros. Y viajes, no tantos como me hubiera gustado, pero tampoco me puedo quejar. Empecé el año en la increíble ciudad de Nueva York, hace un año exactamente andaba paseando por NYC, donde disfruté mucho, y aprendí, algo siempre se aprende. Fui a Barcelona dos veces en invierno y en verano, ambas por trabajo, y aunque fueron viajes cortos y ya conocía la ciudad, fueron visitas intensas, por supuesto también aprendí. Más adelante volví a volar a las pitiusas. Y para terminar el año volví a mi querido Oslo, donde también disfruté, me deleite, y aprendí.
Por fin terminé aquello que hace tanto empecé y abandoné tantas veces. Me costó, sobretodo tiempo, y esfuerzo, pero al final lo conseguí.
Laboralmente parece que me voy haciendo un hueco, que poco a poco voy teniendo mi sitio, aunque todavía me queda mucho camino que recorrer y mucho que aprender.
Me atreví a iniciar una nueva vida sola con todos los miedos, tristeza y melancolía que acarrea, pero con la esperanza que sea para mejor.
Y nos dejó el chuchillo de la familia después de quince años.
Estas ultimas cosas han sido lo más negativo de este año, pero en fin, no siempre todo es de color rosa.
Pero también hubo reencuentros memorables con viejos compañeros de pupitre de colegio. Y nacimientos, muchos, niños y niñas de gente que me rodea, y que a mí también me ha hecho feliz.
Por tanto puedo concluir diciendo que el 2009 ha sido un buen año y así lo recordaré, con sus luces y sombras como la vida misma.
Para este año y nuevo decenio que ya está aquí espero seguir mejorando y afianzando en mi trabajo, y que lo demás venga rodado, si es que tiene que venir. Ser un poquito más organizada, sólo un poquito, esto también. Mucha salud para quienes me rodean. Viajar más, conocer alguno de los países y ciudades que hace tiempo tengo ganas de visitar. Y ser feliz, muy feliz.
Por fin terminé aquello que hace tanto empecé y abandoné tantas veces. Me costó, sobretodo tiempo, y esfuerzo, pero al final lo conseguí.
Laboralmente parece que me voy haciendo un hueco, que poco a poco voy teniendo mi sitio, aunque todavía me queda mucho camino que recorrer y mucho que aprender.
Me atreví a iniciar una nueva vida sola con todos los miedos, tristeza y melancolía que acarrea, pero con la esperanza que sea para mejor.
Y nos dejó el chuchillo de la familia después de quince años.
Estas ultimas cosas han sido lo más negativo de este año, pero en fin, no siempre todo es de color rosa.
Pero también hubo reencuentros memorables con viejos compañeros de pupitre de colegio. Y nacimientos, muchos, niños y niñas de gente que me rodea, y que a mí también me ha hecho feliz.
Por tanto puedo concluir diciendo que el 2009 ha sido un buen año y así lo recordaré, con sus luces y sombras como la vida misma.
Para este año y nuevo decenio que ya está aquí espero seguir mejorando y afianzando en mi trabajo, y que lo demás venga rodado, si es que tiene que venir. Ser un poquito más organizada, sólo un poquito, esto también. Mucha salud para quienes me rodean. Viajar más, conocer alguno de los países y ciudades que hace tiempo tengo ganas de visitar. Y ser feliz, muy feliz.